Reseña: Si decido quedarme

Título: Si decido quedarme

Autora: Gayle Forman

Editorial: Salamandra – Letras de bolsillo

Edición: Tapa blanda

Género: Contemporánea

Páginas: 183

SINOPSIS

Mía tiene diecisiete años, un hermano pequeño de ocho, y un padre músico y el don de tocar el chelo como los ángeles. Muy pronto se examinará para entrar en la prestigiosa escuela de Juilliard, en Nueva York, y, si la admiten, deberá dejarlo todo: su ciudad, su familia, su novio y sus amigas. Aunque el chelo es su pasión, la decisión la inquieta desde hace semanas.

Una mañana de febrero, la ciudad se levanta con un mando de nieve y las escuelas cierran. La joven y su familia aprovechan el asueto inesperado para salir de excursión en coche. Es un día perfecto, están relajados, escuchando música y charlando. Pero en un instante todo cambia. Un terrible accidente deja a Mía malherida en la cama de un hospital. Mientras su cuerpo se debate entre la vida y la muerte, la joven ha de elegir si desea seguir adelante. Y esa decisión es lo único que importa.

OPINIÓN

Tenía muchas ganas de leer este libro, así que aprovechando que parecía que iba a salir para la lectura conjunta de la sección Compartiendo lecturas del blog Los mundos de Chibita, me lo traje para casa, salió elegido y aquí estamos reseñando.

Mía es una joven de diecisiete años, violonchelista, adora a su familia y es afortunada en la amistad y el amor, con un futuro prometedor. De repente un accidente de tráfico trunca su vida y ella debe decidir si quiere afrontar su nueva vida o dejarse ir.

La verdad es que aunque como digo quería leerlo no había leído ni la sinopsis, me parecía que estaba bastante claro sobre qué iba, el hecho de cómo llega Mía a su situación lo he descubierto directamente en la lectura.

Si decido quedarme es un libro entretenido que se lee en un rato, o dos, con partes muy emotivas pero del que esperaba un poco más.

No me malinterpretéis, me ha gustado, pero creía que me encontraría con algo más emotivo aún, sentimental, con profundas reflexiones, y que me hiciera llorar. Ya sabéis, cosas de las expectativas.

Está narrado en primera persona, entre presente y pasado. Mía nos cuenta su actual situación mientras rememora y nos cuenta sus recuerdos de forma aleatoria. Esto ha hecho que desde el principio me haya sentido parte de la historia, ya que es algo muy personal contado de la misma forma.

En mi opinión lo más interesante de la trama es la disputa interior de la protagonista, a fin de cuentas reñido entre luchar o rendirse, da que pensar ¿qué haríamos nosotros si, en esa situación, tuviéramos la posibilidad de elegir?

Morir es fácil. Lo duro es vivir.

Tiene un ritmo ágil y es muy amena, pero algunas cosas me han parecido que se repetían demasiado. Aún así no llega a resultar lento o pesado.

Nuestra protagonista, Mía, es un personaje que no ha terminado de calarme. La razón es que en ciertos aspectos me parecía egoísta o es que simplemente yo no entiendo que se preocupe más por ciertas personas que por otras, no sé. Aunque es cierto que eso va cambiando un poco y empieza a darse cuenta de cuál es realmente su situación y parece que ahí si empieza a hundirse un poco. Me explico, no quería que se hundiera pero sí que se mostrara menos fría en ocasiones.

A los demás personajes los conocemos mayormente por los recuerdos de Mía y algunas apariciones. Sus padres, su novio Adam, su mejor amiga Kim y su hermano pequeño Teddy, para mí el más entrañable.

A los que quizás podemos conocer un poco más son Adam y Kim, ambos me han gustando y dejan claro lo importante que es Mía para ellos.

En cualquier caso ganas. Y en cualquier caso pierdes. ¿Qué puedo decirte? El amor es una mala arpía.

Algo muy destacado en la historia es la música, y me ha gustado mucho la unión de nuestra protagonista con su instrumento.

La mayoría de los personajes tienen una relación estrecha con ella, Mía se siente un poco fuera de lugar por el hecho de dedicarse a la música clásica cuando sus padres y su novio son rockeros.

Y como anécdota curiosa os contaré que mientras acababa el libro tenían la tele puesta en casa y empezó un programa de estos de conciertos dedicado a los chelos. En serio, lo digo de verdad, fue una casualidad graciosa.

Hay partes que para mí han sido realmente conmovedoras pero en general creo que a la historia le ha faltado sentimiento.

El final me ha dejado satisfecha, podríamos considerarlo un final abierto dado que tiene su continuación pero la trama en sí ha quedado cerrada y para mi gusto está muy bien.

Ahora me queda decidir si leer su segunda parte o no. Por un lado quiero saber qué pasa pero por otro después de leer varias opiniones en las que no lo recomendaban como el primero me tiene en duda. Ha sido una buena lectura y no me gustaría echar la historia a perder. Como he dicho, en mi opinión así tal como está queda bastante bien.

En conclusión, una lectura entretenida, con momentos emotivos, de la que esperaba más pero que tampoco me ha decepcionado.