Autora: Christine R.
Angel
Editorial: Red Apple
Edición: eBook
Género: Juvenil
Romántica
Páginas: 143
SINOPSIS
A sus dieciséis años, Valeria es de las que piensan que hay que vivir la vida a tope. Algo alocada pero con un gran corazón, que ha quedado roto en mil pedazos. Pensando solo en disfrutar de lo que la rodea y tener la mejor adolescencia que cualquiera pueda tener, no cuenta con encontrarse a León, un fotógrafo veinteañero con un oscuro pasado y con mil dudas en su cabeza.
Pero al corazón no le manda nadie y pese a los intentos de Valeria, poco podrá resistirse al joven fotógrafo quien sin saberlo, le enseñará mucho más de la vida de lo que Valeria nunca habría esperado.
Porque... ¿Quien puede resistirse al amor cuando este decide entrar de pronto en tu vida?
Una historia de amor en la que el pasado no es algo olvidado sino algo con lo que vivir día a día.
OPINIÓN
Me enfrenté a esta lectura sin leer la sinopsis y por lo tanto sin saber con qué iba a encontrarme, esperaba algo fresco y entretenido eso sí, pero por el contrario ha sido algo frustrate.
La narración es bastante carente, o quizás inexperta,
pues es demasiado simple e inmadura: demasiadas comas, repeticiones, se detiene
demasiado a describir, por ejemplo, qué lleva puesto su protagonista y pasa por
encima de las escenas con más importancia.
A ratos me ha dado la sensación de estar leyendo un borrador incompleto,
como si fuera recopilando escenas y descripciones pero después no les hubiera
dado forma.
Por otra parte la trama deja que desear y no me he
creído el drama de esta historia de amor. Valeria, nuestra protagonista, se
enamora de un chico mayor que ella y se pasa desde el primer momento diciendo
que la diferencia de edad es muy grande, que no está bien, que ella es menor…
Por lo que yo me imaginaba un hombre veinte años mayor que ella, y no. El drama
son ocho años de diferencia. Que sí que ella es menor, pero tiene casi diecisiete
años y legalmente puede mantener una relación con quién quiera y a su pareja no
le supondría un problema legal y me atrevo a decir que tampoco social. Además
su anterior novio era mayor de edad también y llevaba su relación con total
libertad.
En cuanto a los personajes, Valeria
tiene dieciséis años y presume de ser muy madura para su edad, cosa que a mí no
me ha parecido en absoluto.
Y León aunque no me ha disgustado
tampoco ha sacado gran cosa de mí.
Ciertamente trata temas importantes en la adolescencia,
pero no adentra en ninguno lo suficiente y otros se resuelven de manera muy
precipitada.
El final es de lo más desconcertante y ni me lo
esperaba ni lo entiendo. Y después viene el epílogo, que parece que arregla
todo pero que a mí me ha dejado más fría que conforme.